Es lunes, y Lucía y Bea están yendo hacia el colegio. Ya habían hablado la noche anterior, pero están repasando los detalles de cuando Vero llamó a Bea. Lucía y Sandra no habían podido localizar a Vero en todo el domingo. Se habían hartado de llamarla, de llamar a su casa, de mandarla mensajes… Sandra habló con la madre de Vero, pero solo la sirvió para saber que Vero no había dormido en casa, si no en la de sus abuelos, durante todo el fin de semana.
Llegan a clase, se reúnen con Sandra, que las dice que Vero aún no ha llegado.
Pasan als 2 peimeras horas y Vero no llega, peor en el 2º descanso , Lucía la ve entrar al aula. Rápidamente las 3 corren donde está.
-Vero,¿Por qué no nos cogías el teléfono? estábamos preocupadas….
- Te llamé cuando se cortó y no lo cogías ¿Estabas sin cobertura?
-Vero, di algo…
En esto, Vero se de la vuelta y las deja a todas mudas. Tiene un ojo totalmente morado, y la mitad izquierda de la cara muy hinchada.
-¿Qué te ha pasado….
-¿Pero qué coño…
Vero resopla, por supuesto, tenía la mentira preparada. Odiaba mentirlas, pero en este caso era necesario…
- No me ha pasad nada, me caí en casa de mi abuela mientras me depilaba y me di con el borde del lavabo… un tontería… soy una descoordinada, ya lo sabéis.
Ninguna de sus tres amigas se lo cree, o al menos tienen muchas dudas, peor por suerte en ese momento entre el profesor por al puerta y no les queda otra que dejarla tranquila.
Bea sale del colegio. Ya es miércoles , y cada vez que han intentado sacarle a Vero el tema de su ojo, les ha dado largas o se ha marchado diciendo tonterías. Sacude la cabeza , confusa. No puede creer que con la confianza que tienen unas en otras, no las diga lo que la pasa.
-Bea, espera.
Dios, lo que la faltaba. Es Quique. Lo último que le apetece en estos momentos es hablar con el. Pero es lo que toca. Eres fuerte, se dice, mientras se da la vuelta para mirarle directamente a los ojos.
- Dime, pero rápido, que tengo prisa.
- No te pongas así, sé perfectamente que no tienes prisa…Pero no es el caso. Bea quiero hablar contigo, quiero intentar arreglarlo, y te quiero…
Bea se derrite. Y es que ella le quiere. Más que a nada. Pero no sabe. ¿ y Luis?... Bueno , él tiene a esa tal Ana ¿no?...y Quique…la verdad es que quiere arreglarlo, darle otra oportunidad, hablar, saber por qué la dejó…
- De acuerdo, muy bien. Este finde no están mis padres en casa. Vente y lo hablamos.
- ¿ A las 6?
- Muy bien.
Bea se va hacia su casa. Le gustaría hablar con alguna de sus amigas sobre lo que la acaba de pasar, peor no tiene a Lucía, con la que se va a casa, ella se iba a comer con un nuevo “amigo”.
Se resigna. Bueno, ya se lo contará mañana a todas, o si no las llama esta tarde….¿ me cogerá esta vez Vero el teléfono?
